España: Chamarilería y tienda de embutidos, o para entendernos mejor, solar de despojos y chorizos recios.
Esto es lo que nos queda del maridaje de los grandes partidos, pp y psoe, así en minúsculas. Esta es la debacle que han producido los señores que usan las grandes poltronas para mangonear el país a su antojo, ayudada por supuesto por el pueblo con sus tragaderas. La desolación en todos sus aspectos sin posibilidad de mejora, puesto que si una parte de la juventud (que es la que nos podría sacar del atasco, si es que no acarrea los mismos vicios) está bien preparada,como se dice por estos pagos, el resto es un erial inculto y todos, todos, arrastrando esos genes que nos llevan a volvernos choriceros, chamarileros y lo que se tercie.
En este suelo patrio el que no roba es que no puede, desde los políticos o banqueros que habitan en los castillos, hasta los de la aldea que trabajan y cobran por B, cada uno en su medida, pero que todos usan esos servicios colectivos que pagamos los que pagamos.
¿Cómo cambiar un país de chorizos en un país sensato? Creo sinceramente que no se puede cambiar a no ser que se extirpase esos genes choriceros que portamos, de cualquier forma harían falta dos o tres generaciones con todas las dudas habidas y por haber.
La conclusión es sencilla, tenemos crisis como por cierto la hemos tenido siempre, hasta el fin de los tiempos.
Esto, esto no tiene arreglo.
Este país ya choriceaba allá por el siglo diecisiete que se sepa, y que se sepa lo importamos a las américas. Tienes toda la razón, esto no tiene arreglo.
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